Es el conjunto de obligaciones que contrae una persona cuando decide aceptar y mantener un animal de compañía. Debe registrarlo ante la autoridad competente cuando corresponda, proporcionarle alimento, albergue y buen trato, brindarle los cuidados veterinarios indispensables para su bienestar y no someterlo a sufrimientos a lo largo de su vida.
La Tenencia Responsable implica también la obligación de adoptar todas las medidas necesarias para evitar que la mascota o animal de compañía cause daños a las personas o a la propiedad de otros.
El propietario también es responsable de su alimentación, manejo sanitario y del cumplimiento de toda otra obligación dispuesta en la ley y sus normas complementarias.